El director del Servicio Departamental de Salud (SEDES) Tarija, Nils Cazón, informó que en los últimos meses se produjo una reducción significativa de ingresos económicos, situación que ha generado serias dificultades en el cumplimiento de las obligaciones salariales del personal que cuenta con ítems financiados por la Gobernación.
Cazón explicó que esta situación viene afectando la operatividad de la institución, ya que el SEDES es responsable de la coordinación de los servicios de salud en todo el departamento. “No se ha podido pagar los sueldos del personal con ítems de la Gobernación debido a la falta de recursos. Es una crisis que preocupa porque compromete la estabilidad de nuestros trabajadores y la calidad de la atención”, expresó.
El director del SEDES señaló que, ante este panorama, la institución se encuentra en emergencia administrativa y financiera, lo que obliga a priorizar recursos para áreas críticas del sistema de salud.
Finalmente, Cazón expresó su expectativa de que el nuevo Gobierno nacional pueda dar una solución a este problema estructural mediante la asignación de mayores recursos económicos, de modo que se garantice la sostenibilidad de los servicios de salud en Tarija.