Joaquín Monasterio está al borde de renunciar como entrenador de Oriente Petrolero por los problemas económicos que repercuten en los últimos resultados. La derrota ante Guabirá, este jueves por la noche, lo hizo meditar nuevamente sobre la continuidad en el cargo.
“Es difícil trabajar de esta manera”, comenzó la conferencia de prensa el entrenador, luego de afrontar su segundo partido consecutivo sin poder entrenar con normalidad tras la medida de protesta que asumieron los jugadores por los casi seis meses de sueldos atrasados.
0-2 ante San Antonio Bulo Bulo y 2-0 ante Guabirá, son las dos derrotas que ha sufrido el cuadro Refinero tras ahondar la crisis económica, que tiene contra las cuerdas al presidente Ronald Raldes.
Monasterio considera que el tema salarial se ve reflejado en el desempeño del equipo y eso opaca su imagen como entrenador, es por eso que analizará su continuidad en caso que la dirigencia no solucione el problema.
“Cuando vos competís en fútbol profesional, tenés rivales que tienen diferentes tipos de condiciones, y lo único que nosotros pedíamos era entrenar para poder tener todo lo que logramos, eso se precisa hacer en el día, pero nos cortaron eso y es muy difícil competir de esta manera”, agregó el director técnico.
Vía: El Día