
En una jornada cargada de tensión y esperanza, el Club Aurora de Cochabamba anunció públicamente que acudirá a la última instancia legal disponible para revertir la sanción que lo dejó al borde del abismo deportivo. A través de un comunicado oficial emitido el 27 de agosto, el equipo confirmó el depósito de 77.000 dólares al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), equivalente a 60 mil francos suizos, como requisito para mantener activa su apelación contra la quita de 33 puntos impuesta por el Tribunal de Disciplina Deportiva (TDD) y ratificada por el TAS de la Federación Boliviana de Fútbol.
La sanción, derivada del llamado “Caso Montaño”, involucra al jugador Diego Montaño, quien habría utilizado una identidad falsa para figurar como Sub-20 en la temporada pasada. El escándalo no solo afectó al futbolista —suspendido por dos años— sino también a dirigentes del club como Jaime Cornejo y Sandra Valencia, quienes recibieron tres años de suspensión.
Aurora, que actualmente ocupa el último lugar en la tabla con -8 puntos, ve en esta apelación su última oportunidad para evitar el descenso directo y recuperar los 25 puntos que podrían catapultarlo al sexto lugar del torneo, junto a Guabirá. “Ratificamos a nuestra hinchada que iremos hasta el final con este proceso”, señala el comunicado, que también promete regularizar los salarios pendientes de mayo, junio y julio del primer plantel.
Sin embargo, el drama no termina en los tribunales. Mientras la dirigencia libra su batalla legal, el plantel aurorista se declaró en paro de actividades, exigiendo el pago de sueldos atrasados. La crisis económica y deportiva se entrelaza en un momento decisivo para el club valluno, que se aferra a la esperanza como