
El Club Bolívar emitió un comunicado oficial en respuesta a la denuncia presentada por la Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia (ANPB) y el Círculo de Mujeres Periodistas ante la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), en la que acusan al director técnico Flavio Robatto de incurrir en actos de violencia verbal, amenazas y amedrentamiento contra periodistas, incluyendo presunta discriminación de género.
La denuncia se originó tras una conferencia de prensa realizada el sábado 20 de septiembre, luego del partido entre Bolívar y ABB. Según el documento enviado por la ANPB al presidente de la FBF, Fernando Costa, Robatto interrumpió e increpó a la periodista Gisel Aguilar de Fútbol Canal, presionándola para que opinara sobre el arbitraje antes de formular su pregunta. El gremio periodístico calificó el hecho como un acto de violencia verbal y discriminación de género.
Además, se mencionan otros dos antecedentes: uno en marzo de 2025, cuando Robatto habría insultado al periodista José Quino por referirse a él como “entrenador” en lugar de “director técnico”; y otro en 2024, durante un altercado con un oficial de partido en Santa Cruz.
Bolívar, mediante sus redes sociales, negó que Robatto haya incurrido en actos discriminatorios. Aseguró que el DT expresó su descontento con las decisiones arbitrales “sin distinción entre periodistas mujeres y varones” y que no hubo insultos dirigidos. El club advirtió que no permitirá “interpretaciones ajenas y malintencionadas” que afecten su imagen institucional ni distraigan su enfoque deportivo.
La ANPB y el Círculo de Mujeres Periodistas solicitaron que el caso sea derivado al Tribunal de Ética de la FBF, invocando los artículos 17 y 64 del Código de Ética. En su pronunciamiento, recalcan que el respeto a la prensa es un derecho humano fundamental y una condición indispensable para la vida democrática.
La FBF deberá analizar la denuncia y decidir si corresponde aplicar sanciones éticas al entrenador argentino. Mientras tanto, el caso ha generado un debate sobre los límites del comportamiento de los protagonistas del fútbol frente a la prensa y la necesidad de garantizar entornos libres de violencia en el deporte.