Bolivia en vísperas del balotaje, Arce transparenta la crisis y Paz propone transición democrática

A menos de dos meses del balotaje presidencial, el presidente Luis Arce y el candidato del Partido Demócrata Cristiano (PDC), Rodrigo Paz Pereira, protagonizaron un inédito encuentro en la Casa Grande del Pueblo. El objetivo fue iniciar un proceso de transición democrática en caso de que el oficialismo ceda el poder tras 20 años de hegemonía del Movimiento al Socialismo (MAS).

Durante la reunión, Arce expuso los “diferentes problemas” que enfrenta Bolivia, entre ellos la escasez de divisas, la crisis energética por falta de combustibles, y el desplome de las reservas internacionales. “Queremos que los candidatos se introduzcan en la situación real del país”, afirmó el mandatario, justificando la convocatoria como un acto de transparencia institucional.

Rodrigo Paz, quien lideró la primera vuelta con el 32,06% de los votos, acudió al llamado acompañado por asesores económicos y miembros de seguridad vinculados a la alianza Unidad. En conferencia conjunta, el candidato del PDC destacó la importancia de una “transición pacífica, informada y ordenada” y subrayó las diferencias con el oficialismo en la visión del Estado y el modelo económico.

“Después de 28 años vamos a tener una transición democrática”, celebró Arce, mientras Paz insistió en que “la concertación y la gobernabilidad” son pilares de su propuesta para enfrentar la crisis y restablecer el peso geopolítico de Bolivia.

En contraste, el otro candidato en carrera, Jorge Tuto Quiroga, rechazó la invitación presidencial y acusó al Gobierno de mantener una política de persecución contra opositores. “El Gobierno intenta mostrar una transición democrática mientras mantiene presos políticos como Camacho, Pumari y Añez”, denunció.

La reunión entre Arce y Paz marca el primer paso formal hacia una eventual transferencia de poder, en un contexto de alta fragmentación política y declive histórico del MAS, que apenas alcanzó el 3% en la primera vuelta. El balotaje del 19 de octubre definirá quién asumirá la presidencia el próximo 8 de noviembre, en medio de una crisis económica que exige decisiones urgentes y consensos amplios.