Lo que debía ser un acto de proclamación para el candidato presidencial del MAS-IPSP, Eduardo Del Castillo, terminó en una jornada marcada por la violencia y la fractura interna del oficialismo.

Sectores identificados con el ala “evista” del MAS se movilizaron con fuerza para rechazar la presencia del exministro de Gobierno, generando enfrentamientos que obligaron a suspender el evento. Desde horas previas, se registraron mensajes de rechazo pintados en muros y piedras de acceso al municipio, anticipando el clima hostil que se viviría durante la jornada.
Durante el acto, los manifestantes lanzaron piedras, tomates y petardos al escenario, mientras coreaban consignas como “¡Evo presidente!” y “¡Que se vaya!”. Videos difundidos en redes sociales muestran a asistentes protegiéndose con sillas y parte del escenario destruido. La Policía tuvo que intervenir para controlar la situación.
Del Castillo, quien encabezaba una caravana con sectores interculturales, cafetaleros y mineros, se vio obligado a abandonar el lugar sin poder concluir su discurso. “Aquí está el verdadero pueblo, trabajando por los más necesitados”, alcanzó a declarar antes de retirarse.
El ejecutivo departamental de los Interculturales, Daniel Vega, acusó a dirigentes evistas de boicotear el acto y anunció que se presentará una denuncia penal contra los autores intelectuales de los hechos violentos.
La suspensión del evento en Caranavi evidencia las profundas divisiones dentro del MAS, en un contexto electoral marcado por disputas internas y la pugna por el liderazgo entre las facciones de Evo Morales y Luis Arce.